monografiasparavos.blogspot.com: Anatomía del Sistema Respiratorio

Anatomía del Sistema Respiratorio


ANATOMÍA DEL SISTEMA RESPIRATORIO






·         CAVIDADES NASALES.

            Es la parte inicial del aparato respiratorio, en ella el aire inspirado antes de ponerse en contacto con el delicado tejido de los pulmones debe ser purificado de partículas de polvo, calentado y humidificado.
            Las paredes de la cavidad junto con el septo y las 3 conchas, están tapizadas por la mucosa. La mucosa de la nariz contiene una serie de dispositivos para la elaboración del aire inspirado.

PRIMERO: Está cubierta de un epitelio vibrátil cuyos cilios constituyen un verdadero tapiz en el que se sedimenta el polvo y gracias a la vibración de los cilios en dirección a las coanas, el polvo sedimentados es expulsado al exterior.

SEGUNDO: La membrana contiene glándulas mucosas, cuya secreción envuelve las partículas de polvo facilitando su expulsión y humedecimiento del aire.

TERCERO: El tejido submucoso es muy rico en capilares venosos, los cuales en la concha inferior y en el borde inferior de la concha media constituyen plexos muy densos, cuya misión es el calentamiento y la regulación de la columna de aire que pasa a través de la nariz.  Estos dispositivos descritos están destinados a la elaboración mecánica del aire, por lo que se denomina REGIÓN RESPIRATORIA.
  
            En la parte superior de la cavidad nasal a nivel de la concha superior, existe un dispositivo para el control del aire inspirado, formando el  órgano del olfato y por eso esta parte interna de la nariz se denomina REGIÓN OLFATORIA; en ella se encuentran las terminaciones nerviosas periféricas del nervio olfatorio, las células olfatorias que constituyen el receptor del analizador olfatorio.
           
·         FARINGE.
           
            Es la parte del tubo digestivo y de las vías respiratorias que forma el eslabón entre las cavidades nasal y bucal por un lado, y el esófago y la laringe por otro. Se extiende desde la base del cráneo hasta el nivel de las VI - VII vértebras cervicales.

Está dividida en 3 partes:

1-     porción nasal o rinofaringe.
2-     Porción oral u orofaringe.
3-     Porción laríngea o laringofaringe.

PORCION NASAL: Desde el punto de vista funcional, es estrictamente respiratorio; a diferencia de las otras porciones sus paredes no se deprimen, ya que son inmóviles. La pared anterior está ocupada por las coanas. Está tapizada por una membrana mucosa rica en estructuras linfáticas que sirve de mecanismo de defensa contra la infección.

PORCION ORAL: Es la parte media de la faringe. Tiene función mixta, ya que en ella se cruzan las vías respiratorias y digestivas. Cobra importancia desde el punto de vista respiratorio ya que puede ser ocluida por la lengua o secreciones, provocando asfixia.

PORCION LARINGEA: Segmento inferior de la faringe, situado por detrás de la laringe, extendiéndose desde la entrada a esta última hasta la entrada al esófago. Excepto durante la deglución, las paredes anterior y posterior  de este segmento, están aplicadas una a la otra, separándose únicamente para el paso de los alimentos.

·         AMÍGDALAS.

            Las amígdalas también llamadas tonsilas son extensiones de tejido linfoide situados en la faringe y que constituyen el anillo de Waldeyer, protegiendo la entrada de las vías respiratorias de la invasión bacteriana. En el anillo linfático de Waldeyer, los linfocitos entran enseguida en contacto con los gérmenes patógenos que hayan podido penetrar por la nariz o por la boca y de esta forma pueden desencadenar una pronta respuesta defensiva de nuestro organismo, lo que es muy útil en el caso de los recién nacidos y menores de tres años de edad. Sin embargo, esto mismo puede ser el causante de problemas de infección en personas a partir de los tres años (como la amigdalitis).    

            Según la localización en la que se encuentran en la faringe se llaman: amígdala faríngea, tubárica, palatina y lingual.

·         LARINGES.

            Es un órgano impar, situado en la región del cuello a nivel de las IV, V y VI vértebras cervicales. Por detrás de la laringe se encuentra la faringe, con la que se comunica directamente a través del orificio de entrada en la laringe, el ADITO DE LA LARINGE, por debajo continúa con la tráquea.

            Está constituido por una armazón de cartílagos articulados entre sí y unidos por músculos y membranas. Los principales cartílagos son:

-          Tiroides.
-          Epiglotis.
-          Aritenoideos.

            A la entrada de la laringe se encuentra un espacio limitado que recibe el nombre de GLOTIS. Cerrando la glotis se encuentra un cartílago en forma de lengüeta que recibe el nombre de EPIGLOTIS y que evita el paso de líquidos y alimentos al aparato respiratorio durante la deglución y el vómito, si permanece abierto se produce la bronco aspiración.

            La laringe en su interior presenta un estrechamiento, producido por 4 repliegues, dos a cada lado, denominándose cuerdas vocales superiores e inferiores, encargadas de la fonación.

·         TRAQUEA.

            Es la prolongación de la laringe que se inicia a nivel del borde inferior de la VI vértebra cervical y termina a nivel del borde superior de la V vértebra torácica, donde se bifurca, en el mediastino, en los dos bronquios.
   
            Aproximadamente la mitad de la tráquea se encuentra en el cuello mientras que el resto es intratorácico. Consta de 16 a 20 anillos cartilaginosos incompletos (cartílagos traqueales) unidos entre sí por un ligamento fibroso denominándose ligamentos anulares. La pared membranosa posterior de la tráquea es aplanada y contiene fascículos de tejido muscular liso de dirección transversal y longitudinal que aseguran los movimientos activos de la tráquea durante la respiración, tos, etc.

            La mucosa está tapizada por un epitelio vibrátil o cilios (excepto en los pliegues vocales y región de la cara posterior de la epiglotis) que se encuentra en movimiento constante para hacer ascender o expulsar las secreciones o cuerpos extraños que puedan penetrar en las vías aéreas.
  
            El movimiento ciliar es capaz de movilizar grandes cantidades de material pero no lo puede realizar sin una cubierta de mucus. Si la secreción de mucus es insuficiente por el uso de atropina o el paciente respira gases secos, el movimiento ciliar se detiene. Un Ph < 6.4 o > de 8.0 lo suprime.

·         BRONQUIOS.

            A nivel de la IV vértebra torácica la tráquea se divide en los bronquios principales derecho e izquierdo. El lugar de la división de la tráquea en dos bronquios recibe el nombre de bifurcación traqueal. La parte interna del lugar de la bifurcación presenta un saliente semilunar penetrante en la tráquea, la CARINA TRAQUEAL.
    Los bronquios se dirigen asimétricamente hacia los lados, el bronquio derecho es más corto (3 cm), pero más ancho y se aleja de la tráquea casi en ángulo obtuso, el bronquio izquierdo es más largo (4 - 5 cm), más estrecho y más horizontal. Lo que explica que los cuerpos extraños, tubos endotraqueales y sondas de aspiración tiendan a ubicarse más frecuentemente en el bronquio principal derecho. En los niños menores de 3 años el ángulo que forman los dos bronquios principales en la Carina, es igual en ambos lados.

   El número de cartílagos del bronquio derecho es de 6 a 8 y el bronquio izquierdo de 9 a 12. Los cartílagos se unen entre sí mediante los ligamentos anulares traqueales.

   Al llegar los bronquios a los pulmones, penetran en ellos por el HILIO PULMONAR, acompañado de vasos sanguíneos, linfáticos y nervios, iniciando su ramificación. El bronquio derecho se divide en 3 ramas (superior, media e inferior), mientras que el izquierdo se divide en 2 ramas (superior e inferior).

    En el interior de los pulmones cada una de estas ramas se divide en bronquios de menos calibre, dando lugar a los llamados BRONQUIOLOS, que se subdividen progresivamente en BRONQUIOLOS de 1ero, 2do y 3er orden, finalizando en el bronquiolo terminal, bronquiolo respiratorio, conducto alveolar, sacos alveolares y atrios.

   A medida de la ramificación de los bronquios va cambiando la estructura de sus paredes. Las primeras 11 generaciones tienen cartílagos como soporte principal de su pared, mientras que las generaciones siguientes carecen de él.

·         BRONQUIOLOS.

            Los bronquiolos son las pequeñas vías aéreas en que se dividen los bronquios llegando a los alvéolos pulmonares.

            Los bronquiolos se encuentran en la parte mediana del pulmón. En nuestros pulmones tenemos alrededor de 60.000 bronquiolos (30.000 en cada pulmón) que se dividen, a su vez, en unos 600.000.000 de alvéolos pulmonares.  Es importante destacar que la tráquea lleva el aire a los bronquios, de ahí a los bronquiolos y por último a los alvéolos pulmonares, y regresa en forma de dióxido de carbono (CO2) por la misma vía. Este ciclo se continúa sucesivamente para conformar el proceso total de la respiración.

            No poseen cartílagos, la pared es únicamente musculatura lisa. Los bronquiolos permiten que uno no se ahogue y a contra-reflejo de eso se produce la tos y los estornudos.

·         ALVEOLOS.
           
            Tiene forma de taza con revestimiento plano simple, y se apoya en una membrana basal elástica delgada; un saco alveolar consiste en dos o más alvéolos que comparten una abertura común.

            La pared de los alvéolos está formada por dos tipos de células epiteliales:

1- LAS CÉLULAS ALVEOLARES (NEUMOCITOS) TIPO I son epiteliales planas simples y forman un revestimiento casi continuo de la pared alveolar; son delgadas y son el sitio de intercambio gaseoso.

2- CÉLULAS (NEUMOCITOS) TIPO II, también llamada células septales; son células epiteliales redondas o cúbicas cuya superficie libre contiene microvellosidades que secretan el líquido alveolar, el cual mantiene húmeda la superficie entre las células y el aire. Este líquido incluye un surfactante (mezcla de fosfolípidos y lipoproteínas) parecido al detergente; este líquido disminuye la tensión superficial del líquido alveolar y la tendencia al colapso de los alvéolos.

            Los macrófagos alveolares son fagocitos errantes que retiran las partículas diminutas de polvo y otros desechos de los espacios entre los alvéolos.

            Bajo la capa de células alveolares de tipo I, se encuentra la membrana basal elástica.

            Alrededor de los alvéolos, hay una red de capilares proveniente de las arteriolas y vénulas del lobulillo; estos capilares tienen una pared de una sola capa de células endoteliales y membrana basal.

            El intercambio de O2 y de CO2 entre los espacios alveolares de los pulmones y la sangre ocurre por difusión a través de las paredes alveolares y capilar. Los gases difunden por la membrana respiratoria formada por cuatro capas:

1-     la pared alveolar formada por una capa de células alveolares de tipo I y II y los macrófagos;
2-     la membrana basal epitelial, subyacente a la pared alveolar;
3-     la membrana basal capilar, que suele fusionarse con la epitelial;
4-     la pared capilar, formada por las células endoteliales del capilar.

            La membrana respiratoria tiene 0,5µ de espesor, lo que permite una rápida difusión de los gases.

·         PULMONES.

            Son grandes órganos pares, esponjosos, llenan gran parte de la cavidad torácica. Se
extienden desde el diafragma por debajo (base) hasta algo por encima de los clavículas (vértice).

            Por delante y detrás están las costillas. La cara interna es cóncava para dejar lugar a las estructuras mediastínicas (grandes vasos, esófago, tráquea, bronquios) y el corazón. La concavidad del lado izquierdo es mayor. El bronquio principal, junto con los vasos sanguíneos pulmonares, unidos por tejido conectivo y formando el pedículo (pié pequeño), entran a cada pulmón por una hendidura llamada hilio.

            Las cisuras dividen al pulmón derecho en 3 lóbulos y al izquierdo en 2 lóbulos.  Cada pulmón está cubierto por una membrana pleural que forma un saco continuo (pleura visceral); se repliega a nivel del hilio y cubre también la cavidad torácica (pleura parietal).
           
            La cavidad pleural (virtual) contiene un líquido lubricante. Los pulmones y la pleura visceral se hallan inervados por el nervio vago y fibras simpáticas y parasimpáticas. La pleura parietal está inervada por los nervios intercostales y frénico.

            El pulmón consiste en conductos aéreos y tejido elástico, por lo tanto es un órgano elástico esponjoso con una superficie interna muy grande para que se realice el intercambio gaseoso (80 m2).

·         PLEURA.

            Representa una túnica serosa, brillante y lisa. Como toda serosa, posee 2 membranas, una que se adhiere íntimamente al pulmón (pleura visceral) y otra que reviste el interior de la cavidad torácica (pleura parietal). Entre ambas se forma una fisura (la cavidad pleural), ocupada por una pequeña cantidad de líquido pleural que actúa como lubricante y permite el deslizamiento de ambas hojas pleurales.

            La pleura visceral carece de inervación sensitiva mientras que la parietal si posee inervación sensitiva, esto hace que los procesos que afectan a la pleura parietal sean extremadamente dolorosos.
   
            La pleura parietal se divide en 3: pleura costal, pleura diafragmática y mediastínica.

·         METODOS DE DIAGNOSTICO PARA EL SISTEMA RESPIRATORIO.
           
            Las pruebas para detectar enfermedades respiratorias sirven para una evaluación pormenorizada de la función pulmonar y cada una de las pruebas valora un aspecto distinto de la función pulmonar.

            A continuación se muestran los métodos diagnósticos más utilizados en la detección de problemas en el sistema respiratorio.


1-     Estudios Radiológicos: La radiología es una técnica diagnóstica basada en la utilización de rayos X. Sus efectos dependen de la dosis-tiempo, región corporal expuesta, susceptibilidad celular e individualidad biológica. Incluye la radiografía de torax, la tomografía axial computarizada y gammagrafía pulmonar.

2-     Estudios Endoscópicos: Los estudios endoscópicos de diagnóstico, realizados para valorar trastornos respiratorios, incluyen broncoscopio, laringoscopia y mediastinoscopia.

3-     Exploración de la función pulmonar: Este grupo de pruebas miden la capacidad pulmonar de retención de aire, las capacidades inspiratoria, espiratoria y de intercambio de oxígeno y anhídrido carbónico. Se realiza para complementar el diagnóstico de enfermedades pulmonares, observar su evolución, valorar el grado de incapacidad o la respuesta al tratamiento. Incluye la espirometría, prueba broncodilatadora, gasometría arterial y la pulsioximetría

4-     Toracocentesis: La toracocentésis puede realizarse con fines terapéuticos o diagnósticos. La realización de la toracocentésis con fines diagnósticos tiene como finalidad la obtención de una muestra de líquido para su análisis bioquímico y microbiológico. Con ello se establecerá el diagnóstico.

5-     Análisis de esputo: Consiste en la toma de una muestra del esputo obtenido, bien de forma espontánea tras un acceso de tos, o bien mediante el uso de aparatos capaces de inducir el esputo, de forma que, una vez con seguida la muestra, puedan ser analizadas sus células, provenientes del tracto respiratorio del paciente, o bien realizar un estudio microbiológico con el fin de aislar un posible germen infeccioso.


CLOSE ADS