ASMA
BRONQUIAL
El asma es una
enfermedad crónica del sistema respiratorio caracterizada por vías
respiratorias hiperreactivas, es decir, un incremento en la respuesta broncoconstrictora
del árbol bronquial. Es un trastorno que provoca que las vías respiratorias se
hinchen y se estrechen, lo cual hace que se presenten sibilancias, dificultad
para respirar, opresión en el pecho y tos.
CAUSA.
En las personas
sensibles, los síntomas de asma pueden desencadenarse por la inhalación de
sustancias causantes de alergias, llamadas alergenos o desencadenantes.
Muchas personas con
asma tienen antecedentes personales o familiares de alergias, como la fiebre
del heno (rinitis alérgica) o eccema, mientras que otros no tienen tales
antecedentes.
PATOGENIA
Aunque se conoce que
el asma es una condición causada por una inflamación persistente o crónica de
las vías aéreas, los componentes precisos de esta inflamación están todavía por
dilucidar y las causas de esta inflamación son inciertas. Muchas células inflamatorias
pueden estar implicadas e interactuar con otras de alguna manera compleja.
Este proceso de
inflamación crónica puede que conduzca a cambios estructurales, tales como la
fibrosis, el engrosamiento o hipertrofia del músculo liso bronquial, hipertrofia
de las glándulas y la angiogénesis lo que puede dar lugar a una obstrucción
irreversible de la vía aérea.
Desde el punto de
vista emocional, si bien no se ha precisado su causa, está bien definido que
las emociones del paciente toman un papel muy importante en el desarrollo de la
enfermedad. Es fundamental, para el enfermo de asma, llevar una vida no solo
llena de cuidados en relación a los agentes patógenos desencadenantes, sino
también cuidados en cuanto a su ambiente emocional para que su vida transcurra
sin estrés.
SÍNTOMAS Y SIGNOS.
Los síntomas más
característicos del asma bronquial son la disnea o dificultad respiratoria de
intensidad y duración variable y con la presencia de espasmos bronquiales,
habitualmente acompañados de tos, secreciones mucosas y respiración sibilante.
También se caracteriza por la rigidez torácica en el paciente y su respiración
sibilante. En algunos pacientes estos síntomas persisten a un nivel bajo,
mientras que en otros, los síntomas pueden ser severos y durar varios días o
semanas. Bajo condiciones más graves, las funciones ventilatorias pulmonares
pueden verse alteradas y causar cianosis e incluso la muerte
TRATAMIENTO.
El tratamiento convencional del asma bronquial puede ser:
- Sintomático.
Tiene por objeto interrumpir la crisis mediante medicamentos de acción rápida,
como la adrenalina, corticoides, oxigenoterapia, etc.
- Preventivo.
Indica el uso regular de broncodilatadores, antihistamínicos, corticosteroides,
terapia respiratoria, inmunoterapia específica, etc.